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Desierto

He olvidado el mecanismo del beso, el sentimiento de desear la boca de alguien, la emoción de conjugar en un ósculo la necesidad del otro. No sé dónde se me quedaron las ganas, o si es que no hay todavía un otro también ganoso que conmueva mi deseo y me invite a saborear el gusto de su pasión acumulada en un simple intercambio de fluidos bucales. Y no es que muera por ello, y tampoco que sea una necesidad apremiante, hace mucho que no sé qué es una necesidad, mucho menos apremiante. Simplemente hoy recordé cuánto me gustaba besar(¿te?) y por ello me di cuenta de este olvido, de esta carencia, de la emoción de compartir con - ti - go, un simple beso.

Comentarios

Unknown ha dicho que…
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Homeronica ha dicho que…
A veces se vive la vida, en un beso. Saludos. H.

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