Pidiendo un favor escribo, que no se me tenga compasión. Mis ojos no se plagan de llanto, mis desvelos no existen, no estoy muerta en vida, no suspiro de amor.
Con ojos acusadores, buscan al culpable de mi soltería, ese culpable no existe, si acaso, soy yo misma la única responsable.
Y no es porque la entrega no haya sido completa y plena, y mi ser y atención hayan sido para un él que existió, ese no es el punto.
Creo que si somos capaces de amar, también deberíamos ser capaces de alejarnos cuando el amor es tanto que nos olvidamos de nosotros mismos y entregamos y entregamos. Así que la única responsable del desamor soy yo misma por mis ganas de ya no dar, de simplemente querer recibir.
Por eso alejen las miradas violentas, los reclamos injustos, las ganas de proteger a la amiga y salvar a la solterona.
Solo en mi existe este caudal de amor tan grande que satisfecha y feliz, lo confieso, lo sigo conservando para mi, para mis ensueños, en mis madrugadas insomnes y en mis despertares felices.
No me tengan compasión por favor. Yo, yo si sigo amando.
Con ojos acusadores, buscan al culpable de mi soltería, ese culpable no existe, si acaso, soy yo misma la única responsable.
Y no es porque la entrega no haya sido completa y plena, y mi ser y atención hayan sido para un él que existió, ese no es el punto.
Creo que si somos capaces de amar, también deberíamos ser capaces de alejarnos cuando el amor es tanto que nos olvidamos de nosotros mismos y entregamos y entregamos. Así que la única responsable del desamor soy yo misma por mis ganas de ya no dar, de simplemente querer recibir.
Por eso alejen las miradas violentas, los reclamos injustos, las ganas de proteger a la amiga y salvar a la solterona.
Solo en mi existe este caudal de amor tan grande que satisfecha y feliz, lo confieso, lo sigo conservando para mi, para mis ensueños, en mis madrugadas insomnes y en mis despertares felices.
No me tengan compasión por favor. Yo, yo si sigo amando.
Comentarios