Hoy amanecí azul, con ese tono azul eléctrico que llega a parecer obscuro.
No me percaté cómo a lo largo de la noche cada parte de mi cuerpo se fue llenando de esta intensidad de color y me fue inundando aun en la inconciencia de la pesadilla que todavía recuerdo pero que nada me significa.
Y es que esta azulidad me hace perderme en mis propias cavilaciones, llenarme de dudas y sentirme ausente de todos los que me rodean, gritando un auxilio que no alcanza a salir porque no se cómo articularlo, hacer cientos de preguntas que no tienen respuesta porque simplemente no hay quién las pueda escuchar.
Me duele…
Necesito…
Me desilusiona…
No se qué hacer con…
¿Y al final importa formular las preguntas? Siento muy en el fondo que no y así el azul que sólo me cubría comienza a penetrar los poros y correr por las venas y las arterias y me inunda y me ahoga, y me mata y me asfixia.
Hoy que amanecí azul, me gustaría tanto tener un hombro blanco en donde poder recargar mi cabeza embotada y ahí vaciar todo este color que ya no se cómo lavar.
Ya no quiero estar azul, quiero volver a ser blanca iluminada sin necesidad de otros colores ni otras mezclas. Quiero saber cómo brillar de nuevo.
No me percaté cómo a lo largo de la noche cada parte de mi cuerpo se fue llenando de esta intensidad de color y me fue inundando aun en la inconciencia de la pesadilla que todavía recuerdo pero que nada me significa.
Y es que esta azulidad me hace perderme en mis propias cavilaciones, llenarme de dudas y sentirme ausente de todos los que me rodean, gritando un auxilio que no alcanza a salir porque no se cómo articularlo, hacer cientos de preguntas que no tienen respuesta porque simplemente no hay quién las pueda escuchar.
Me duele…
Necesito…
Me desilusiona…
No se qué hacer con…
¿Y al final importa formular las preguntas? Siento muy en el fondo que no y así el azul que sólo me cubría comienza a penetrar los poros y correr por las venas y las arterias y me inunda y me ahoga, y me mata y me asfixia.
Hoy que amanecí azul, me gustaría tanto tener un hombro blanco en donde poder recargar mi cabeza embotada y ahí vaciar todo este color que ya no se cómo lavar.
Ya no quiero estar azul, quiero volver a ser blanca iluminada sin necesidad de otros colores ni otras mezclas. Quiero saber cómo brillar de nuevo.
Comentarios
En mi caso fue una foto que espero dejar por aquí en breve si las musas se dejan seducir. O me seducen, claro.